miércoles, 1 de abril de 2009

SÁBADO 28 APAGÓN IMPULSADO POR WWF - Por Ing. Guillermo Hamlin *

(original: 27 de marzo de 2009)- El sábado 28 de marzo de 2009, a las 20:30 hs proponen que apaguemos la luz por una hora, para alertar sobre el “calentamiento global”. A nivel planetario piensan que 1.000 millones de personas apagaremos la luz.

¿No querrán que nos acostumbremos a los apagones?

¿Quiénes son los de WWF? Es una Fundación ecologista internacional de diseño británica, fundada en 1961 y su primer presidente fue el príncipe Bernardo de Holanda, al declinar su designación el príncipe Felipe de Edimburgo. Aunque más adelante Felipe hubo de tomar las riendas de la organización central con sede en Gland, Suiza, ante el escándalo en que se vió sumido Bernardo al aceptar coimas en las operaciones de compras de aeronaves de parte de Holanda a la empresa norteamericana Lockheed. Esta Fundación tiene representantes en 90 países, en la mayoría de ellos conserva el nombre de WWF(World Wildlife Foundation), pero en la Argentina es Fundación Vida Silvestre(una traducción literal), en Ecuador es Fundación Natura, en Chile WWF Chile, en Perú WWF Perú, etc.

Esta convocatoria cuenta con apoyo oficial del gobierno de la ciudad quien lo anuncia en su página www.buenosaires.gov.ar, como “La hora del planeta”. También fue anunciado en la revista “Viva” de clarín, mediante un artículo titulado “La luz buena” firmado por la periodista Marina Aizen.

El príncipe Carlos de Gales, velando por los intereses familiares, estuvo de gira reciente por Latinoamérica primero Brasil y luego Ecuador (islas Galápagos) arengando a los gobiernos nativos a enfrentar el “calentamiento global” mediante la inversión en energías renovables, como la eólica y la solar.

En nuestro país, además de la habitual difusión del tema por los canales de cable National Geografic, Infinito, el programa TN Ecología conducido por Sergio Elguezabal, etc., el canal 7 nacional lo difundió el sábado 21 de marzo a las 17 hs, en el programa Recurso Natural, conducido por el conocido integrante de CQC, De Lapuente. Representantes de PNUMA(Programa de Naciones Unidas de Medio Ambiente), y de las Fundaciones Transnacionales de Al Gore, Greenpeace y Vida Silvestre, volvieron a recitar su letanía de las inminentes catástrofes climáticas que nos acechan, de no adoptar recetas tan simples: reducir ó eliminar las emisiones de dióxido de carbono e invertir en energías renovables como la eólica y la solar, a las que nunca se olvidan de mencionar, como en toda buena campaña publicitaria, en la que siempre hay que repetir el nombre del producto.

No cabe duda a ésta altura, de que esta escalada de difusión mediática del tema del calentamiento global y de su combate por medio de las energías renovables, se lanzó a partir del anuncio de Obama de que ése iba a ser el camino a seguir, como parte de su plan de recomposición del capitalismo a nivel planetario. Anunció que destinará 15.000 millones de dólares para la instalación de plantas productoras de dichas tecnologías, como una manera de crear trabajo para sus compatriotas y “salvar al planeta”. Los líderes europeos, como Gordon Brown, Sarkozy, Angela Merkel, Zapatero, etc se pronunciaron en sintonía, especialmente Dinamarca que tiene a la principal productora de aerogeneradores, Vestas, que se instaló en Colorado EEUU, en donde es promotora del programa “Planeta en peligro” de la CNN.

Con el pretexto de la lucha contra el “calentamiento global” ya nos lanzaron la primer “Arma de Destrucción Masiva”, en esta “Guerra por los Recursos del Planeta”, que fue el negocio transnacional de las semillas transgénicas y de agroquímicos para producir biocombustibles a partir de soja, maíz y palma aceitera. Dado que es evidente que los biocombustibles no pueden reemplazar a los combustibles fósiles, sino que los complementan, su propósito último, más allá de los negocios, al utilizar tierra para producir combustible en lugar de alimentos, no puede ser más que el genocidio de las poblaciones pobres del tercer mundo.

Ahora ya tienen en las rampas de lanzamiento a otras dos “Armas de Destrucción Masiva” y están en la cuenta regresiva:
1) Las políticas sobre energía eólica y solar y 2) La firma de un nuevo pacto climático de emisiones de dióxido de carbono.

¿Porqué estas políticas sobre energía y reducción de emisiones son genocidas?

Son métodos válidos para generar energía eléctrica, tanto la eólica como la solar. Además son muy “convincentes” ¿Acaso el viento y el sol no son gratis? No producen dióxido de carbono. ¿Acaso es malo reducir las emisiones de dióxido de carbono?

Bueno, en realidad si fuéramos a producir estos paneles solares y aerogeneradores en forma masiva, habría que contabilizar el incremento de dióxido de carbono que se genera al utilizar energía para su producción y luego descontarlo del supuesto ahorro de emisión al reemplazar energías fósiles por esta nueva generación.

La cuestión es que estas energías no pueden reemplazar a las energías fósiles.

Nos vamos a explicar. Toda matriz de generación eléctrica debe tener, para asegurar el vital suministro en todo momento, generadores denominados de base, en operación todo el tiempo, y por tanto deben ser de generación masiva y continua, y también debe tener generadores de pico, que son los que deben entrar en servicio en forma rápida en las horas de máxima demanda energética.

Debido a estas necesidades, pueden operar como generadores de base las centrales nucleares, las térmicas y las hidráulicas. Las centrales térmicas de gas, especialmente, como las de pico, por sus características de rápida puesta en servicio.

Por otro lado, vemos que tanto la energía eólica como la solar no pueden cumplir ninguno de estos dos servicios dadas sus características de producción intermitente y de baja generación.

Tenemos como ejemplo de esto, el caso real de Dinamarca que es el país que tiene más aerogeneradores instalados per cápita del mundo. Sin embargo no pudo dejar de operar ninguna de sus centrales térmicas porque las necesita como soporte para que no haya apagones. Es decir que el reemplazo es parcial, mientras sople el viento. Si el viento se para deben entrar en servicio generadores de arranque rápido, como lo son las centrales térmicas.

En EEUU, en Texas también se verifica el mismo fenómeno. Las centrales térmicas deben estar de apoyo para que no colapse el sistema. Esto es debido a que el viento que sopla, el 60% del tiempo no está dentro del rango de velocidades que permite la generación eléctrica. Si los vientos son muy fuertes esa energía no puede aprovecharse porque los aerogeneradores se desconectan para que sus delicados mecanismos no se arruinen, si los vientos son muy suaves no alcanzan a impulsar las aspas.

Entonces comprobamos que la energía eólica puede complementar, es decir sumar a una matriz de generación eléctrica, durante el tiempo en que sople el viento se podrá dejar de utilizar alguna central térmica, pero ésta deberá estar en alerta, lista para entrar en servicio cuando pare el viento.

Es evidente que los paneles solares y otros modos de aprovechar la energía solar tienen una intermitencia previsible: de noche no generan, en cambio los molinos son imprevisibles dentro de las posibilidades de la ciencia meteorológica.

Ambas tecnologías, tanto la eólica como la solar comparten dos características: la intermitencia de generación y la baja densidad de flujo energético. Esto hace que compartan otras desventajas derivadas de aquellas. No son costo-efectivas y para mantener su operación deben ser subsidiadas.

Hemos explicado ya la característica de la intermitencia de generación, ahora debemos explicar lo de la baja densidad de flujo energético. Lo haremos con ejemplos. Esto significa, que para una determinada cantidad de generación de energía eléctrica, necesitan una superficie de tierra para lograrla mucho mayor que la que requieren las energías fósiles, la nuclear, y la hidráulica.

Podríamos hacer el siguiente cálculo. Cuántos molinos necesitaríamos y qué superficie medida en hectáreas tendría nuestra granja eólica para generar una potencia nominal de 600 MW, la capacidad de la Planta Nuclear de Embalse Río Tercero.

General Electric tiene disponibles aerogeneradores de 1,5 MW de potencia nominal. Son de enorme tamaño, la torre es de 95 metros de altura y de 5 metros de diámetro en la base, las aspas de 38,5 metros de largo (tres, dispuestas en ángulos de 120°) barren un diámetro de 77 metros. Para comparar, un Jumbo 747 tiene 70 metros de largo. Cada aerogenerador cuesta unos 3 millones de u$s.

La primera cuenta que uno haría sería dividir la potencia de 600 MW por la de los molinos y obtener la cantidad necesaria. Esto nos daría 400 molinos.
Pero no tan rápido. Debemos considerar el factor de disponibilidad que significa la cantidad de energía que realmente produce el molino, considerando el tiempo que realmente estará en operación, descontado el mantenimiento, impulsado por los vientos y su perfil de velocidades, dividido por la potencia nominal del molino, la que tiene escrita en su placa. Este factor es en promedio del 25%, es decir que para obtener la generación indicada en la placa del molino necesitamos 4 molinos.
O sea que necesitaremos para nuestro ejemplo, no 400 sino 1600 molinos para asegurarnos la generación de 600MW.

General Electric recomienda que para que se pueda aprovechar al máximo los vientos, los flujos de aire de los molinos no deben interferirse entre sí, recomendando para ello una separación especificada en diámetros de barrido de manera que en las filas la separación debe ser de tres diámetros de barrido o sea 77mx3= 231m. Entre filas la separación debe ser de cinco diámetros de barrido, es decir 77mx5= 385m. En definitiva cada molino necesita un área de 231mx385m= 88.935m2= 8,89 Ha. La superficie de nuestra granja eólica debe ser entonces de 8,89x1600= 14.224 Hectáreas. (142 Kilómetros cuadrados, casi la superficie de la Ciudad de Buenos Aires). El costo de la tierra es importante y debe computarse.

Estas granjas eólicas tienen necesidad de una gran cantidad de aluminio para cablear los molinos en serie para aumentar el relativo bajo voltaje generado individuamente, para elevarlo a 110.000 volts para que su transmisión desde la granja eólica a los usuarios a kilómetros de distancia sea posible a bajo costo. El costo del aluminio es alto y también debe ser computado.

No debemos dejar de considerar que ésta granja eólica necesita una generación equivalente como soporte para cuando el viento deje de soplar.

Como vemos, el aire es gratis y por lo tanto es gratis el costo variable de generación eléctrica, pero hay que tener en cuenta todos los costos, además del variable existen los fijos, los de capital y los de mantenimiento, lo que hace que el costo de generación de energía eléctrica por medios eólicos sean casi 100% más caros que la generación de una central nuclear.

Lo mismo ocurre con la generación eléctrica a partir de la energía solar. La limitación está dada en principio por el bajo flujo energético del sol: en promedio 600 watts por metro cuadrado en latitudes bajas, tropicales o subtropicales (impensable en zonas circumpolares). Si el total de esa energía se pudiera transformar en energía eléctrica podríamos mantener encendidas seis lámparas de 100 watts por metro cuadrado, durante el día. El problema reside en que, con la eficiencia actual de los mejores paneles fotovoltaicos, sólo se puede transformar el 10% de esa energía. De manera que para alimentar seis lámparas de 100 watts durante el día se necesitaría una superficie de 10 metros cuadrados. Si tratáramos de alcanzar una generación de 600 MW como en el ejemplo de la eólica: ¿Cuánta superficie de tierra sería necesaria? Haciendo las cuentas llegaríamos a la conclusión de que serían necesarias 1.000 Hectáreas (10 Kilómetros cuadrados) para generar 600 MW durante el día, y de noche se necesitaría un soporte de generación equivalente. El costo de generación de energía eléctrica por medios fotovoltaicos es del orden de 300% más caro que el nuclear. Este costo no incluye la enorme inversión necesaria para interconectar los paneles y para transformar la corriente continua generada en alterna que permita alimentar las redes existentes. Tampoco incluye el costo de los soportes estructurales de los paneles, medios de protección, etc.

Estos ejemplos nos demuestran que estas maneras de generar energía eléctrica no son útiles para una sociedad industrial ni para las que pretendan llegar a serlo algún día. No pueden reemplazar a las energías generadas por centrales nucleares, térmicas o hidráulicas.

Esta es una de la razones por las que el programa de Obama no afectará a los intereses de las empresas petroleras y también explica el apoyo y financiación de las mismas a las internacionales ecologistas que promocionan el uso de esas alternativas dado que no los amenazan, como sí lo haría el desarrollo intenso de la energía nuclear, con la cual podría efectivamente reemplazarse a las energías fósiles.

Pero éste no es el objetivo buscado, porque resolvería el problema energético en el mundo, lo que éste proyecto malthusiano busca es que se produzca un déficit de energía especialmente en el mundo en desarrollo, y que su población tienda a disminuir.

La actual crisis financiera, que en realidad es económica, ha impactado negativamente sobre los flujos comerciales internacionales y miles de puestos de trabajo se han perdido y corren peligro muchos más en todo el orbe.

La tríada imperialista, o sea, EEUU, la UE y Japón, los miembros de la Comisión Trilateral tratarán de aprovechar esta coyuntura como “La Crisis Perfecta”para instaurar “Un Nuevo Orden Mundial”, favorable a sus intereses y darán otra vuelta de tuerca sobre la “gobernabilidad del tercer mundo”. Intentarán propulsar una suerte de “Gobierno Mundial”. Afirman que esto es necesario dado que a los problemas globales: 1) Crisis Financiera Global 2) Calentamiento Global 3) Terrorismo Global, se necesitan soluciones globales.

La idea es que esta crisis se produjo por falta de control. Pues entonces la solución es el control severo y como sugiere Gordon Brown “los controles deben ser a nivel planetario”. También habla el premier británico de una especie de “New Deal” a nivel global, de una especie de “Plan Marshall” para los países pobres, que son los que se verán más afectados por el cambio climático, según esta óptica. Leáse créditos para que les compremos aerogeneradores y paneles solares, entre otras cosas.

Veremos qué ocurre en la cumbre del G-20 donde China, India, Rusia y Brasil intentarán equilibrar la hegemonía de la tríada.

Pero más adelante viene el acuerdo internacional de Doha sobre el comercio, donde muchos estarán alertando sobre los peligros del proteccionismo.

Luego tendremos los intentos de arribar a nuevos compromisos por el cambio climático, habiendo fracasado el Protocolo de Kyoto que sólo sirvió para el comercio de los bonos de carbono y otros fraudes similares.

¿Por qué Bush no firmó dicho Protocolo y Obama ha declarado que firmará un pacto climático? ¿Es que Bush es “malo” y “Obama es “bueno”? ¿O estaremos presenciando un show de “policía bueno-policía malo”? Ambas actitudes aparentemente opuestas del presidente republicano y del demócrata, en realidad responden a los intereses de los EEUU.
Bush no firmó porque condicionaba su firma a que lo hicieran China y la India a quienes pensaba frenar en sus emisiones y por ende en su crecimiento industrial.

Obama piensa firmar otro pacto que Japón propuso en Bangkok, Tailandia, que fijaría metas de reducción de emisiones de dióxido de carbono por sectores industriales y no por países. Esto fue apoyado por los EEUU y objetado vehementemente por China, India y Brasil. Es que las industrias de mayor emisión de dióxido de carbono son la cementera y la siderúrgica, que en todo plan de desarrollo son las más demandadas. Si esto se aprobara sería un freno al desarrollo industrial del tercer mundo, sería condenar a la pobreza, al hambre a la enfermedad, a la muerte, a grandes poblaciones del planeta. Todo para que se restrinja el consumo y queden como reservas para los centros imperiales. Esperemos que nuestro país acompañe la oposición que harán a éste proyecto, China, India y Brasil.

Por suerte nuestro país ha tomado aparentemente la decisión de apostar al desarrollo nuclear, aprovechando los más de 60 años de experiencia en el rubro. En la edición de marzo de 2009 de la revista Muy Interesante, la Licenciada Norma Boero, Presidente actual de la CNEA, anunció que además de la decisión de finalizar Atucha II, que estará produciendo energía para el 2010, manifestó que “se viene una cuarta central en dos módulos equivalentes a los de Embalse y una quinta central, en la que se va a definir qué tecnología se usará”…”luego está el reactor CAREM diseñado por la CNEA. Se comenzará por un prototipo que es CAREM 25(25MW), que vamos a hacer con el aporte de distintas empresas. Luego desarrollaremos el CAREM 300, reactor de mayor potencia”.

Por supuesto que en la misma edición de la revista, le dieron a Villalonga, de Greenpeace, tanto espacio como el que tuvo la Lic. Boero, lo cual es indignante, pero no sorprendente. Su prédica en contra de los intereses nacionales es constante y forma junto con la mencionada WWF y otras Fundaciones y ONG internacionales una amenaza a las soberanías nacionales de los países del tercer mundo.
Esto está muy bien descripto en el muy recomendable libro de Jorge Orduna “Ecofascismo” Editorial Planeta. Allí investiga los orígenes de estas ONG y el rastro lo lleva a los orígenes del movimiento eugenista británico fundado por Galton, primo de Darwin. La eugenesia, supone el mejoramiento de la especie humana, tratando que se reproduzcan los más adaptados de una generación y que no lo hagan los menos adaptados. Esta teoría fue muy bien acogida en las élites británicas y por supuesto que ellos se consideraban”los mejor adaptados” y con derecho a decidir el destino de los “menos adaptados”. Pensaban que era un derroche que la sociedad (de los mejor adaptados) debieran mantener a los menos adaptados consumiendo recursos inútilmente. Estas ideas fueron utilizadas por el Nazismo y las llevaron a un extremo que hizo que luego de la guerra interimperialista, cambiaron el nombre de eugenesia por nombres más potables como conservacionismo o ambientalismo. Pero los que apoyaron y siguen apoyando y financiando son las élites europeas y norteamericanas a las ahora devenidas Fundaciones ambientalistas o ecologistas. El punto de confluencia es la población excedente(los menos adaptados) del tercer mundo que arruina el ambiente. El Club de Roma con su concepción maltusiana y Henry Kissinger con su informe NSSM 200 a la Casa Blanca, donde propone “La despoblación debería ser la más alta prioridad de la política de los EEUU hacia el Tercer Mundo” Kissinger hablaba de los “useless eaters” es decir consumidores inútiles, concepción eugenésica pura.

Esta política de apoyo a las energías renovables, tanto los biocombustibles, como la eólica y la solar, son los nuevos “espejitos y cuentas de colores” con que pretenden frenar el crecimiento industrial del mundo subdesarrollado, cuya única posibilidad de salir de la miseria es trabajar agregando valor a nuestros recursos, que ellos pretenden arrebatar.
El imperio siempre trató de impedir nuestra industrialización. Los países coloniales, imperialistas, se desarrollaron utilizando el impulso y promoción de sus estados nacionales y apelaron al proteccionismo hasta que sus industrias se integraron sólidamente.
Cuando nosotros quisimos hacer lo mismo, nos sacaron la escalera: nos recomendaron, no, así no vale, hay que hacerlo sin el apoyo estatal que es mal asignador de recursos y sin proteccionismo, que genera industrias artificiales e ineficientes.
Ahora repiten el esquema, el imperialismo hizo crecer sus sociedades industriales guiados por el afán de lucro, sin considerar lo ambiental ni lo social y contaminaron el ambiente. El ambiente donde ellos viven fue contaminado, y sus empresas contaminaron y contaminan el nuestro.
Cuando nosotros pretendemos desarrollarnos, otra vez nos sacan la escalera: así no se puede, que van a contaminar el planeta, nuestro planeta. Si quieren desarrollarse lo deben hacer sin contaminar. Entonces nos recomiendan qué tecnología utilizar, tecnología que, por supuesto, nos venderán ellos mismos.
Podría pensarse que estoy reclamando derecho a desarrollarnos contaminando, todo lo contrario. Nosotros podemos desarrollarnos recuperando nuestros recursos naturales y desarrollar Tecnología Conveniente, definida como aquella que desarrollada por nosotros mismos utilice nuestros recursos naturales en forma racional, no contaminante ni degradante del medio ambiente y que combine una relación entre automatización e intensidad de trabajo humano compatible con la necesidad de generar puestos de trabajo para nuestros compatriotas y la necesidad de producir a costos razonables, que permitan un crecimiento armónico de nuestra economía.

* Guillermo Alejandro Hamlin es miembro constituyente de la organización Socialismo Latinoamericano. Ingeniero Industrial de la UBA con 36 años de trabajo en la industria. De esa extensa trayectoria, 19 años transcurrieron en SOMISA - la gran siderúrgica de Fabricaciones Militares-, 2 en SIDERAR, nombre que recibió SOMISA al comprarla el grupo Techint, luego en Lero Técnica S.R.L. -productora de auxiliares químicos y agroquímicos-, Scac -productora de piezas de hormigón armado pre tensado-. Posteriormente fue consultor en manejo de residuos peligrosos y desde el 2005 es Director Gerente de Medam BA S.R.L. empresa dedicada al tratamiento de residuos patogénicos.

(Fin del artículo – Fin de la carta)

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